El sushi artesano

Con la consigna de la mar manda este restaurante destaca su preocupación por el producto.

Este restaurante no es cualquier local sushi. De hecho no tiene carta fija, pues sus productos e ingredientes cambian diariamente, dando prioridad al concepto de “la mar manda”; es decir, las preparaciones son determinadas por la accesibilidad de los productos con un criterio de frescura predominante, así como sus hierbas y condimentos, que son totalmente orgánicos. Su carta es nutrida y novedosa, por ejemplo, con sus Izayakas, platos para comenzar y compartir. Allí están Gyosas Ebi Shitake Trufadas (los famosos dumping  rellenos con camarón al carbón y hongos shitake en salsa de membrillo, nabo, sésamo y aceite de trufas), Los Edamame (vainas de porotos de soya,  rostizados al carbón y aceite de rábano) o el Usuzukuri Koi (finos cortes de pescados y setas en emulsiones de salsa de ostras, quinoa pop y ciboulette).
En la sección “La Mar Manda”, de pescados y mariscos del día, hay platos como Hotate (ostiones y pescados frescos, marinados en escabeche de cebolla y palta), Bataa Hotate (ostiones y pescados en mantequilla y ajo negro, tocino crocante y ciboulette). En los sushis por cierto hay sashimis, nigiris (donde destaca Nigiri Foie Gras), gohan (como camarones y pescados en panko, paltas, verdura crocante, arrope de Chañar y huevo), y por supuesto, los populares Makis, como el Hosomaki Clásico y el Maki Furai.
Por supuesto, como es habitual, hay Cajas Do, de 50 piezas, también de 40, y una Premium para los más avezados y fans del sushi de primer nivel.