Oriente costero

Cocina asiática y de un poco más allá, con sabores y texturas intensas moldeadas por toques de autor, forman parte de una propuesta que marca diferencias en la Ciudad Jardín

Una idea de actualidad se cruza por Teien. Formas minimalistas, tonos oscuros, que rodean un sentir culinario donde las fusiones asiáticas son su razón de ser. Platos coreanos, japoneses, mezclas entre ambas culturas y más allá, según los arrestos creativos del chef, marcan la pauta. Las gyozas son hechas en el local, rellenas de cerdo o confit de pato, entre otras opciones. Por cierto, el ramen campea y la untuosidad de su versión porcina es la más requerida. Súmense costillas al estilo coreano con toques agridulces y picosos, como también la fritura supercrocante de los karaage, tanto de mollejas como de coliflor marinada un día entero. A modo de complemento resaltan sus cebiches, preparados con pesca del día y responsable, a decir de los dueños: capturas a pequeña escala desde el mar local. Una cualidad entre tantas de un restaurante que navega por el espíritu de su tiempo.