El clásico vietnamita

El restaurante mantiene sus clásicos platos, favoritos de un público fiel a estos sabores orientales.

Fue el primer restaurante en regla basado en la gastronomía vietnamita que se instaló en Santiago hace poco más de una década, de la mano de los franceses Thomas Pignal y Dominique Thuy-Trinh Vo Nguyen. Es el restaurante original, pues ahora también existe una “sucursal” en el Paseo El Mañío de Vitacura. En una casa de fachada continua típica de la calle Loreto, mediante una entrada estrecha y por un pasillo, se llega a un espacio amplio donde la decoración oriental inunda el restaurante, de piso adoquinado y amplia barra. En su carta destaca el plato estrella en sus entradas: el Cha Giò, arrollados de nem envueltos con lechugas y menta fresca con salsa típica vietnamita a base de pescado. Otro clásico, pero de los platos de fondo, es el Atún de Hoi An, un filete de atún sellado al sésamo con toques de jengibre y soya. Y como la influencia francesa no se puede obviar, allí está el Pato cinco Perfumes salteado con cebolla, pimentones y albahaca, mientras que en los postres se mantiene el toque galo con los clásicos Fondant de Chocolate y la Crème Brûlée. Un verdadero e imperdible paseo por esta cocina oriental que tiene a su mejor representante en Patronato.