Antofagasta familiar

En el sector sur de la ciudad resalta la gastronomía de aires peruanos de un restaurante pensado para el disfrute de grandes y chicos.

Al sur de la capital regional aparece, casi de manera subrepticia, el puerto minero de Co- loso, una antigua caleta de pescadores –aún funcionando- y paseo para los antofagastinos de toda época. Camino a ese enclave popular apa- rece Camarón RestoGrill, a modo de chiringuito playero. La estética es sencilla, con esteras vege- tales, espacios cómodos y por cierto, muy bien sombreados. Capear el desierto costero y con aire familiar es la idea, por medio de una propuesta de estilo peruano, sumado a una pincelada de platillos nacionales. De esos que nunca pueden faltar como el Congrio frito. Pero las derivadas de la comida de nuestros vecinos mandan en el menú. El Trío de causas por ejemplo, de buen tamaño y bien golosa. Los camarones y el lomo saltado se antojan como una prioridad, lo mismo que otro de sus platos estelares: Entraña con camarones en salsa huancaína. Vigor marino y poder cárnico, pensado para un espacio esencialmente familiar, donde no falta una coctelería donde el sour a la peruana no falla. Amplitud y comodidad, a toda prueba.