Al calor de una cava

Una vocación culinaria internacional, de diversidad y donde confluye tanto el vino como la coctelería, está dando qué hablar en el centro de la “Ciudad del Sol”.

Las ganas de ir por más, desde el vino y la comida, inspiró a los dueños de Sous Sol para comenzar hace seis años. Eso implica confiar en armas clásicas -de las carnes, sándwiches y picadillos- pero con la vuelta de tuerca que significa el vino y la coctelería. De un lado, una cava desde donde aparece una serie diversa de botellas, a buenos precios por su relación directa con las viñas buscando acercar el vino a su clientela; del otro, una vocación por tragos de diverso calibre y sabores, que complementan una propuesta que es tanto restaurante como bar. Aquello les permite jugar con maridajes para platos recientes como el Confit de pato o el Garrón de cordero, que se unen a una selección de pastas, tablas, arroces y una considerable lista de hamburguesas. Un todo de cocina internacional cuya diversidad no deja indiferentes a los quilpueínos.