A la espera de algo más

Autor: Carlos Reyes M.

18 de Agosto de 2023

CRÍTICA GASTRONÓMICA

DEMENCIA, EN VITACURA

91 PUNTOS

Mientras corren los minutos para la reapertura de restaurante De Patio, Benjamín Nast busca mantener en forma su ambición gastronómica. Lo hace desde la trinchera de un bar, Demencia, con menos platos, muchos más bebestibles y una mirada lúdica que marca tendencia la noche vitacurense. Fines de semana con música y una varieté circense -a juego con una grata decoración apalancada con calefacción ad-hoc- aportan rutilancia ambiental y también ingresos, mientras prepara su retorno a esa liga de comedores asiduos a los rankings internacionales.

La suma de esta visita, a diferencia de la del verano recién pasado, resultó un carrusel de sensaciones. Es decir, con altas y bajas. De un lado, la consistente complejidad de sus cócteles de autor como el Desacato ($ 7.400), inclinado a la calidez gracias al ron, la horchata de maní y otros tantos ingredientes que temperan y gustan. Luego, en parte de la comida, hubo tanto desprolijidad como ideas que, si bien pueden gustarle al chef, saben no resueltas del todo. En el primer caso, el Ceviche Demencia ($ 14.900) ofrecía un discurso de pescado blanco acompañado de crema de pistacho, rabanitos y palta, perdidos en una salazón que borroneó toda buena intención del entrante. En el segundo, la Corvina menier ($ 14.500) ofreció un pescado impecable en su punto de cocción, cuya salsa -con un agregado de miso- se llenó de sensaciones de toffee que monopolizaron el plato.

Y luego, otra vez al alza. El Arroz Demencia ($ 18.500), seco y crocante sobre una sartén de fierro, se complementó con un corte firme de palometa y vegetales al dente, coloridos, sabrosos, que volvieron a temperar el ambiente. El cierre dulce de Demencia tropical ($ 6.000) sumó frescor y cierta calidez gracias a la crema de coco, un reguero de masas crocantes girando alrededor de un sorbete de mango, que finalizó una jornada dispar -se notó la ausencia del chef por viaje al momento de la visita-, en un bar donde, desde lo culinario, parece a la espera de la inspiración mayor: un comedor gastronómico que, de momento, duerme en el segundo nivel de la residencia que ocupa.

De los vinos: la carta es comedida en relación al universo coctelero, con una lista más bien ocupada por viñas grandes; hay diversidad en cepas para ser un bar, denotando preocupación en ese sentido. Aparte: precios razonables tanto en botellas como en copas, respecto del barrio donde se ubica.

 

DEMENCIA

91 PUNTOS

Especialidad: cocina de autor.

Carta de vinos: diversa a precios razonables.

Sommelier: no tiene.

Accesorios asociados al vino: copas, aireadores.

Descorche: $ 10.000.

Ideal para: ir en pareja o grupo de amigos.

Delivery: solo retiro en local viernes, sábado y domingo.

Área de reparto: no tiene.

Aplicaciones asociadas: no tiene.

Dirección: Vitacura 3520, Vitacura.

Teléfono: +56 9 3861 1684.

Capacidad: 120 personas.

Consumo promedio: $35.000.

Formas de pago: Efectivo, tarjetas.

Horarios: lunes a sábados de 19.00 a 02.00 horas.

Web: no tiene

Correo electrónico: no tiene 

Wi-fi:

Instagram: @demenciastgo

Disponibilidad de aire acondicionado:

Disponibilidad de estacionamiento propio o valet parking: no

Acceso discapacitados: sí.

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