Ichiban, sigue siendo un nuevo oriente

Nuevos platos le dan un aire distintivo a un comedor que se, según pasan los años, mantiene un aura de modernidad en clave japonesa y oriental.

Autor: Carlos Reyes M.

10 de Diciembre de 2019

Minsu Bang es el dueño y motor de la inventiva de Ichiban. Todo para que siga haciéndole honor al nombre (número uno en japonés) pero más bien por ese sentido del Shokunin, el artesano que busca perfeccionar su trabajo diario al máximo, pensando en un sentido social: entregarle lo mejor a su gente. Por eso se demoró cuatro años en desarrollar la receta de su ramen, dando como resultado el mejor caldo de ese estilo en toda la ciudad, a juicio de quien suscribe. También ha sabido ir más allá de las islas del viejo Cipango y hacerle guiños a la cocina china y coreana. De esa manera va renovándose, satisfaciendo a esos onderos de inicios de la década pasada, que con el tiempo se han hecho compañeros de viaje en su local de Vitacura.

La invitación fue para mostrar algunos de sus platos nuevos y carnívoros. Dos opciones de asado de cocción lenta, pero a la vez quemados al estilo coreano, salseados en tono agridulce. Una triple combinación de matices complejos y textura suave. De entre el lomo de cerdo y el asado de tira de vacuno, el primero resaltó por su terneza y el segundo, por esos tonos quemaditos que le dieron prestancia. Seguramente ese estará dentro de la carta de verano.

Bang suele viajar a Oriente buscando renovar la propuesta, donde aparecen rolls de la más diversa naturaleza. Aunque de a poco, como en otros tantos japoneses y locales afines, se inclinan por el niguiri. La razón, al menos una razón: el arroz de expresa libremente, no se corta, permite saber la calidad del producto y la factura del itamae, o sea el dueño de la barra. Y también el relleno (o en este caso cobertura) se expresa mejor y a fin de cuentas, sirve para probar más y más, no como en el caso de los rolls donde ocho piezas pueden ser demasiado. La versión más reciente de Ichiban era un arroz frito, glutinoso y de cobertura crocante, con un tartar de salmón de visos picosos y dulzones. Complejidad a fin de cuentas; entretención también. Lo que suele haber en uno de los rincones orientales más contemporáneos y sabrosos de la ciudad.

 

Padre Hurtado Norte 1521, Vitacura.
Tel. 224531793
www.ichiban.cl